domingo, 21 de febrero de 2010


Jubilaciones


Por JESUS ANTONIO SAN MARTIN


Se calcula que en España hay ocho millones y pico de jubilados. Pero, dado que el 44% de las empresas prejubilan a sus empleados antes de los 65 años, se estima que para principios del 2013 los jubilados y prejubilados superen los diez millones, previendo que la tasa de defunciones sea como la actual. Para el 2015, si la jubilación se retrasa a los 67 años, un cálculo muy somero arroja que en España continuaría habiendo diez millones de jubilados. De otra manera sobrepasarían los doce millones.

Retrasar la edad de jubilación a los 67 años supone un considerable ahorro para las arcas públicas, ahorro que probablemente ha de despilfarrarse en otros asuntos menos importantes. Pero para millones de ciudadanos que han cotizado durante toda su vida a la Seguridad Social les supone un gravísimo contratiempo, tan grave que este retraso de tan solo dos años para cobrar sus merecidas pensiones les puede llevar a la muerte por inanición, ya que a su edad no encontrarán trabajo y, como tampoco han empezado a cobrar la pensión, no tendrán más remedio que vivir de la caridad.

Pero seguramente muchos ciudadanos que alcancen los 67 años lleven sin trabajar más de 15 años, sobre todo si trabajaban por contrato. Ya ninguna empresa contrata trabajadores mayores de 45 años, y menos de 50. Así que nuestros ciudadanos en paro, cuando alcancen la edad de jubilación, como no han cotizado los últimos 15 años, cobrarán la miseria de una pensión no contributiva.

Todo ello supone que el nivel de pobreza en España superará al de cualquier país de la UE, y con más motivo al doblar España en desempleo a tales países. Dadas las circunstancias, mejor será no cotizar para la vejez y guardar ese dinero en un cajón. Al menos contaremos con algo para mal llevar los últimos años de una fatigada vida laboral.

(Artículo de contraportada de los semanarios de Publicaciones del Sur)

No hay comentarios:

Publicar un comentario